sábado, 7 de diciembre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #8

Un día de Noviembre.
Una habitación, Dios sabe donde.



Abrí los ojos poco a poco, los rayos de luz se filtraban desde un ventanal hasta mi vista deslumbrándola. 
Enseguida me di cuenta de lo mucho que me dolía todo el cuerpo.
Giré la cabeza hacia la derecha, después hacia la izquierda. Lo único que lograba ver eran siluetas levemente difuminadas.
Un grito me sobresaltó, recordándome lo mucho que me dolía la cabeza.
- ¿Papá? ¡Gracias a Dios papá estás vivo! ¿Como te encuentras? -Las palabras sonaban mas bien como ecos molestos en mi cráneo.
- ¿Eh? -Logré decir a duras penas. La vista se me aclaró un poco más y pude distinguir a mi hija sentada en un sillón, justo al lado de la cama donde yo yacía.
Antes de darme cuenta ella salió corriendo fuera de la habitación y dos o tres minutos después entró un desconocido envuelto en una bata blanca. Intuí que podría ser el médico. Seguido de él entró Raul, con un aspecto preocupante. Estaba pálido, tenía ojeras y sus manos se asemejaban a dos bolas hinchadas y rojas. ¿Qué habría estado haciendo? Era imposible adivinarlo.
Tras varias preguntas sobre mi estado el doctor se retiró, y me quedé a solas con Mayka y mi nieto. Cosa que ella se dedicó unos cuarenta y cinco minutos a regañarme sobre mi comportamiento inmaduro y mi falta de preocupación por mi mismo y bla bla bla.
Cuando se sintió suficientemente satisfecha del discurso se retiró, alegando que tenía miles de cosas que hacer.
Raul se quedó.
Nos miramos a los ojos, intentando leer en alguna de las miradas algún hecho con el que pudiéramos empezar una conversación mínimamente normal.
- ¿Qué te pasa? -Dije yo, sorprendido de a los 83 años seguir diciendo las cosas sin pensar.
- ¿A mi?
- ¿Ves a alguien más en esta habitación acaso?
- Veo que tu mala leche sigue ahí, buena señal.
- Seguro que sí. Ahora, contesta a mi pregunta.
- No me pasa nada.
- Tengo sesenta y nueve años más que tú y sigues pensando que me mamo el dedo, chico.
- Yo no he..
- Calla, y cuéntale a este yayo que te pasa anda..
- Bueno, empezando por que el novio de mi madre la maltrata y casi estiras la pata, y acabando por que he discutido con mi novia, uno está como esta. Jodido.
- Ya veo... Pero quiero que sepas que me queda para rato por aquí, y que no permitiré que tu madre vuelva con ese tío. Si algo he aprendido bien, es a berrear. Y por lo de la muchacha esa, no te preocupes, que con los encantos que tienes ya genéricamente, no será difícil solucionarlo, eh.
- Gracias, abuelo.
- De nada chaval, ahora: sal de este antro y ve a buscarme comida de verdad, que la bazofia que me han traído de almuerzo sabe a vomito.
- A sus ordenes.


sábado, 2 de noviembre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #7



Ese mismo día a eso de las 8.
Perdido por Barcelona.



Caminé y caminé. Sin saber realmente a donde quería llegar. El solo pensamiento de que mi hija vuelva con él, me enfermaba. El deja vu de cuando la madre de mi Yara volvió con Pedro me invadio y me susurra que iba a volver a pasar.
No, no...¡No! Me gritaba a mi mismo.
Las lágrimas comenzaban a escocer en mis ojos y ya no sabía si seguir caminando o sentarme a pensar un rato. Me acerqué a un bar que estaba cerca y pedí un baso de agua, por que no llevaba nada encima. Cuando acabé me dirigí al pequeño parque que se encontraba a una calle y me senté en un banco.
Yo quería desaparecer. Sólo desaparecer. Cerré los ojos y la imagen de la piel desnuda de mi Yara me invadió. Nuestra primera vez. Muchas veces habíamos querido hacerlo, pero mi niña quería esperar al matrimonio. Y como yo nunca podía decirle que no...Esperamos.
La recuerdaba, sálveme Dios de la manera en que la recordaba... Recordaba su cara cuando dijo 'sí quiero', recordaba su mirada mientras daba cada paso mas cerca mio con su precioso vestido blanco. Recordaba lo mucho que lloraba a veces, y lo mucho que confiaba en mi.
Siempre fui muy inseguro, pero con ella lo tenía claro. Yo sabía que ella me quería, a pesar de todo, lo sabía, y me negaba a ponerlo en duda.
Había veces en las que se enfadaba, pero yo sabía que con un lo siento y unas cosquillas se le pasaba todo. Cuando estaba con ella, era como si siempre tuviese diez y seis años, ¿Que digo diez y seis? Diez años como mucho.
Entonces el recuerdo de lo mal que lo pasó cuando se alejó de su madre, cuando ella murió en manos de Pedro...Oh señor.
Mi corazón se encogía mas y mas y la desesperación tocaba la puerta de mi mente. ¿Como podía Raul simplemente estar así? Debía ser una falsa imagen. Cualquiera estaría destrozado. Pero el se mostraba imparcial, ausente.
Eso me desconcertaba.
Entonces recordé las palabras de mi Yara, ella solía decirme que: 'todo el dolor siempre sigue ahí, pero es mucho mas fácil hacer como si no está.'
Me angustiaba pensar así de Raul...
Y Mayka ¿En que demonios debía estar pensando como para volver con aquel malnacido?
Cerré los ojos y respiré varias veces pausadamente. Alterarme así no era bueno para mi salud.
De pronto intenté abrir los ojos. No podía.
Mis pensamientos se fueron desvaneciendo poco a poco y todo se volvió el doble de oscuro. Sentí mi peso muerto reposado en el banco y simplemente ahí se acabó todo ¿había muerto? ¿que estaba pasando? ¿porque me siento así? Miles de dudas llenaron mi mente.
Simplemente, en ese momento, no entendía nada, absolutamente.

viernes, 25 de octubre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #6


6 de noviembre de 2083
Barcelona,Cataluña


Amaneció el día siguiente. Después de  sus palabras, no fui capaz de decir nada más. Simplemente me levanté, y me fui a dormir. Me quedé dormido mientras lloraba en silencio.
No escuché a la madre de Raul venir el día anterior, supuse que se debió haber quedado en su casa, con Rubén. O eso, o la había atado a algún radiador o a la cabecera de la cama. Me reí amargamente ante aquel pensamiento. Estupendo, mi humor no se había marchado del todo. Eso era realmente bueno para mi.

Bajé a la cocina siguiendo una rutina. Mas que una rutina, eso era un hábito. No entiendo muy bien porque, pero me fijé en la cocina aquel día. Era rústica, con baldosas color crema por todo el suelo. Cocina a gas y muebles antiguos y clásicos de madera. Y esa ventana, amaba esa ventana, estaba puesta justo donde los rayos de sol podían irrumpir en donde quisieran. Esa era mi casa, eso era lo que yo quería, y lo tenía.

En ese momento me di cuenta de que Raul no había bajado a desayunar, cojí el café que ya estaba en la cafetera, lo tiré y enjuagué el filtro de la cafetera. Luego puse café nuevo y cuando se acabó de hacer me lo serví, serví otro para él en una taza diferente.
Hacía cosa de una hora cuando él bajó, me dio los buenos días, se sentó, y nos bebimos el café en silencio.
Entonces, casi cuando pensé que me estaba ahogando por la falta de sonido, él dijo:
- Lo siento. -¿Que? No entendía nada. Me habría esperado cualquier cosa, menos una disculpa, lo miré atónito.- No debería haberte presionado para que hablemos ayer, no debí obligarte a contarme más...Lo siento.- Agregó él como si me hubiera leído la mente.
-No tienes porque disculparte, chico. Primero: no me obligaste a nada, ni me presionaste, yo lo hice porque quise. Segundo: ya me va bien eso de hablar sobre tu abuela después de todo. Y tercero, último pero no menos importante: sabes que te puedo hablar de ella, cuanto y como tu quieras, no podría negarte nada. Para algo estamos los abuelos, ¿no? Para mimar a canijos como tú.- Sostuve mi opinión con la voz mas cariñosa que pude hallar en mi.
- Supongo...- Dijo él sin convicción.
-Escúchame, Raul: no tienes que disculparte, si quiero que pares de hacerme preguntas, lo diré.
- Vale, vale...- Contestó Raul.
- Anda, lava los platos y acompaña a tu abuelo al sillón o al sofá, que me duele todo el cuerpo y estar allí es muy cómodo.
- Vooooooy. - Respondió él bastante desganado por la idea.

Cuando acabó de lavar los platos y me ayudo a ir hasta el sillón, él se sentó en el sofá.
Un sonido interrumpió en la casa. Mayka, seguro.
Raul se levantó para abrir porque él es mas rápido que yo. Normal. Los años estaban a su favor.
- Mira quien es por la mirilla, Raul. - Dije en modo de advertencia.
Él me hizo caso. Miró, y por su cara, pude deducir que estaba realmente preocupado.
Abrió y dejó entrar a su madre cerrando la puerta tras ella.
Ella traía una sonrisa de oreja a oreja, no sabía si realmente sería buena la noticia que iba a darnos.
Mayka se sentó al lado de Raul y procedió a explicarnos el motivo de su alegría desenfrenada:
- He hablado con Rubén.- 'Oh,genial.' dijo irónicamente mi sentido común.- Me ha pedido perdón y me ha pedido que vuelva con él, también me ha prometido que no volvería ha pasar y me ha dicho que me quiere, me ha comprado un precioso ramo de rosas y pfff... Entiéndeme papá... Por favor.

Simplemente me quedé en shock. Me limité a observarla en silencio, preguntándome, sin éxito de encontrar respuesta, porqué ella había decidido volver.
Decidí levantarme y irme a dar una vuelta. Por donde sea. Solo quería huir.


martes, 15 de octubre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #5


Ese mismo día de noviembre.
Barcelona, Cataluña.


Me sorprendí a mi mismo llorando en silencio. Pequeñas gotas de agua salada corrían por mi rostro. Raul me miraba en silencio mientras me abrazaba. Rápidamente me sequé las lagrimas, y continué:
- La alegría me invadió cuando ella dio el ultimo salto y cayó en mis brazos, no pude evitarlo y la besé. Ella solo me miro, y sonrió en mitad del beso. Eso me enterneció hasta tal punto en el que sentí derretirme. Llegamos a mi casa y al día siguiente mi madre fue al colegio para hacer todos los tramites, todo salió bien, todo iba bien...
-Pero...- Siguió Raul, impaciente como siempre.
- Pero no todo fue bien siempre, un día, llamaron a las 3 de la mañana, ya habría pasado un año, era un día cualquiera de un octubre de 2014, entonces, llegó. La mala noticia, a la que estuvimos huyendo tanto como pudimos, llego. Esa llamada...Era la policía. La madre de Yara, había fallecido. Nos dijéron que Pedro, en un ataque de ira, la empujo, ella resbaló y se abrió la cabeza en un radiador. Ellos discutían por Yara. Ella lo había dejado, se supone. Él no tendría que haber estado allí, pero el hizo caso omiso a la orden de alejamiento que ella puso. Tu ... tu abuela casi se me va. Casi se muere cuando se enteró. Incontables fueron las noches en las que me desperté mientras la escuchaba llorar.
- ¿Nunca la viste llorar?- Interrumpió él con una sensatez que me abrumó.
- ¿A que te refieres?- Pregunté desconcertado.
- A que si nunca fuiste a su habitación a consolarla o algo, no se...
- Sí, lo hice, y preferí no haberlo hecho.
- ¿Por que?
- Mira, tu abuela lo pasó mal ¿vale? Ella ...ella solo intentaba evadirse, ella...joder, ella intentaba ser fuerte y yo...yo no hacía nada. Joder Raul, no hice nada, podría haber hecho algo para ayudarla, calmarla, no sé... algo. Pero no, no lo hice. Fui cobarde y me limité a decirle una tras otra vez que no se hiciese daño pero ella no me escuchaba, nunca. Yo la solía admirar en silencio, a ella y a su valentía. Hasta que un día, lo supe. Lo descubrí.- Relataba yo con la tristeza marcada en cada palabra.
- ¿Que ocurrió abuelo? - Interrogó él con voz quebrada, tartamudeando.
- Una noche, me desperté. No había ruido. No se oía nada. Eso fue lo que me pareció al principio. Poco a poco, mientras abría los ojos, empecé a escuchar pequeños alaridos, alaridos ahogados. Pequeños rastros de sollozos. Me levanté de un salto y me dirigí a la habitación de tu abuela. De aquel momento, hace ya 70 años, y juro que habría preferido un balazo a ver lo que vi.
- ¿Que viste? - Interrumpió Raul, tan ansioso como siempre.
- Encontré a tu abuela, tumbada en la cama con una almohada en la cabeza ahogando los gritos de su llanto. Ella se percató enseguida, se sentó al borde de su cama y me miró. Entonces, no se porqué, le miré el brazo. Vi...sus marcas de guerra. Desvié mi mirada y allí estaba...una cuchilla. Mas bien era una hoja de bisturí, de las que se compran en las farmacias. Supe de inmediato que esa pequeña guillotina, había sido el pincel de las marcas en los brazos de mi Yara. Lo entendí todo. Ella siempre con manga larga, siempre que se reían de ella se apretaba los brazos para sentir dolor, y así reír también, o tan solo sonreír haciéndose la indiferente. Dios perdone lo tonto que fui...
- No fue culpa tuya, tu no lo sabías...-Susurró Raul con lagrimas en los ojos.
- Sí, lo fue.
- No. -Volvió a replicar. Desde donde estaba, podía notar como le escocían las lagrimas en los ojos.
- ¡Sí, sí, sí lo fue maldita sea! Si yo...si yo no la hubiese incitado a dejar su casa, o si le hubiese dicho más veces lo mucho que la quería, si hubiese sido mas listo, si de verdad hubiese estado allí eso no habría pasado - Las lagrimas me pudieron, y bailaron por mis mejillas como bailarinas de fuego. Quemando todo rastro de resistencia a su paso.
- Abuelo...yo... -Balbuceaba él, casi debatiendo consigo mismo el decirme o no lo que tenía en mente.- No fue culpa tuya, no podrías haber hecho nada ¿me oyes? Nada. La abuela, tal y como la describes, ella lo hubiese hecho igual, quieras o no, no puedes martirizarte por ello porque, ¿como ibas a saberlo? No puedes culparte. Tal vez si lo hubieses sabido tu también lo hubieras pasado mal, talvez todo hubiese sido incluso mucho peor, pero eso no lo sabes. Deja de pensar en lo que hubiera sido, y piensa en lo que te enseñó, en lo que realmente fue, una lección. - La madurez de sus palabras me pilló desprevenido. No. Realmente no me lo esperaba. Y menos de él. No sabía si sentir orgullo por mi nieto, o vergüenza por mi comportamiento, realmente él tenía razón.

martes, 8 de octubre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #4


´5 de noviembre de 2083
Barcelona, Cataluña


El día siguiente llegó como si hubiera tardado un año. Intenté levantarme con cuidado, para que no me doliese nada, fue inútil. El día anterior me había pasado mucho tiempo acurrucado, llorando como un niño.
Baje a la planta de abajo, a eso de las nueve para comer algo. Ella estaba allí, mi pequeña con Raul.
Mi corazón se convirtió en gelatina y mis lágrimas amenazantes rondaban la superficie.
- Hola- Dijo ella por fin, con voz suave tan dulce como siempre, su tono de disculpa me pilló por sorpresa.
- Hola, cariño- Saludé yo con la voz mas cariñosa que encontré en mi ser.- Buenos días Raul, ¿Como has amanecido?- Él se limitó a sonreír y asentir, sin convicción alguna ciertamente. 
Y durante todo el día se mantuvo callado, casi ausente.
Cayó la tarde, tan lentamente como cae una pluma. Mayka se marchó, se fue a hablar con él, dijo. A intentar arreglar las cosas con Rubén, dijo. Mantuve mis ganas de ir detrás de ella cuando abrió la puerta, decirle que no hacía falta, que aquí estaba bien y eso. 'Habría sido inútil, ella ya es mayorcita para cuidar de si misma ' me dije a mi mismo intentando ahogar la voz de mi conciencia que susurraba '¿Porque no la detuviste? ¿Y si la pega otra vez?' yo evadía esas preguntas.
 Raul se quedó conmigo, no se fue a ninguna parte, cosa que me extrañó. Eran las seis y media, ya hacía una hora que su madre se había marchado.
- Oye, ¿podemos seguir hablando? Ya sabes, de lo tuyo con la abuela
- ¿Para que quieres hablar de eso ahora,chico?
- Me ayuda a desconectar, me gusta hablar de ello.
- Esta bien, pero tendrás que recordarme por donde íbamos, lo cierto es que ya no me acuerdo.
- Vuestro primer beso, pero antes de que empieces, he estado buscando, y me pregunto ¿como llegó a tener pulmonía la abuela? ¿Iba desnuda al colegio en pleno invierno o que? - Estallé en risas, él también.
- Que ocurrencias tienes hijo...- Admití mientras mis carcajadas cesaban.- A ese punto tenía que llegar yo ahora, cuando nos separamos después de...bueno...ya me entiendes. Entonces se lo pregunté, ella me contó algo que realmente me impactó, me contó que su madre se había enamorado de un tipo, dos años atrás, aparentemente bueno, si recuerdo bien, ese hombre se llamaba Pedro, Pedro López, este hombre se portó bien los tres primeros veces, hasta que un día de diciembre, el irrumpió en la habitación de mi Yara, la forzó, y Dios lo perdone porque la violó.- Los ojos de Raul se abrieron, no se si por la noticia, o por la lágrima que caía por el contorno de mi cara. Entonces seguí: 
- Ella dijo que no se lo contó a su madre porque tenía miedo de herirla, a ella, él la pegaba. A su madre, quiero decir. Y ella siempre lo justificaba. Esa tarde, ella lloró hasta que no le quedaron lágrimas, y yo con ella. Al día siguiente volvió a su casa, de mala gana, esta claro.
- Pero, ¿y tu no hiciste nada?
- ¿Que querías que hiciese?
- No se, si la querías, podrías haber hecho algo.
- Chico, eres muy inocente, no sabes cuando te mienten. Claro que hice algo.
- ¿Que hiciste?
- Me la traje a vivir conmigo
- Espera, espera, espera, espera. ¡¿ Que hiciste, qué?!
- Si, solo durmió una noche más en aquella casa, en el colegio la fui a buscar y le dije que aquella noche, hiciese las maletas, yo vivía bien, no era rico, pero le conté a mi madre su historia y dijo que se podía quedar, pero que tenía que comportarse bien y aprenderse las reglas de casa. Ella puso algo de ropa en una mochila, y le comentó a su madre donde se iba, el porque, y ella aceptó a regañadientes. Subí como pude hasta su ventana, tampoco fue difícil pues estaba en un segundo piso, y tenia una gran enredadera, la cual me llevé marcada en las manos después. Ella bajo también por las enredadera, pero con guantes. Sí chaval, tu abuela era bastante mas lista que yo. Tuvo que bajar por allí, porque de otro modo tendría que vérselas con el novio de su madre, y  era lo que menos le apetecía, lo que menos nos apetecía.

viernes, 4 de octubre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #3




4 de noviembre de 2083
El Raval, Barcelona

Ya hacía un mes, un mes y tres días. Un mes y tres días hacía desde que mi nieto me dijo que vendría. Esperé y esperé y nadie aparecía. Casi no salí por temor a que viniera mientras yo estaba ausente. Entonces me di cuenta de que tristemente mi nieto era mucho mas que una simple compañía. Era mi única compañía. Decidí cambiar de sitio para pensar y me adentre por los recovecos del Raval, seguía igual que siempre. La vida me ha enseñado que un viejo como yo no tiene que ir por esos sitios con nada valioso encima, te lo podían quitar.
Paseé por espacio de casi dos horas, estaba cansado, muy cansado. Caminé otros trece minutos hasta llegar a casa, me faltaba el aire cada vez mas y no sabía por que. No le di importancia, llegué a mi hogar y me acerqué hacia el sillón, dejándome caer en el sin fuerza alguna. Mis ojos se cerraron lentamente y en un abrir y cerrar de ojos había pasado dos días.

6 de noviembre de 2083
Barcelona, Cataluña

Me desperté sobresaltado, asustado a su vez. Corrí al quiosco mas cercano y compré cualquier periódico, dos días mas. Volví lo mas rápido que pude a mi casa y mire las llamadas perdidas en el teléfono, no se que dolió más; que no hubiera ninguna, o ese dolor de cabeza que sentía.

Ese mismo día, unas horas mas tarde, yo estaba mirando el fuego de la chimenea, inmerso en los recuerdos de mi princesa Yara mientras lágrimas salían de mis ojos poco a poco, escuché la puerta, alguien aporreando el timbre con el dedo, golpeando la puerta, eran las seis, estaba llubiéndo fuera, hacía frío y yo...yo ya no esperaba a nadie.
Me apresuré a abrir la puerta y vi una imagen que partió mi alma, mi Mayka...mi niña y su hijo, mi nieto, Raul.
Quise maldecir al cielo por como estaban, ella lloraba y él tenía una mirada perdida, casi indescriptible, simplemente indescifrable. Ella estaba llena de moratones, se podía deducir que le habían dado una golpiza de las grandes, espantado observe una pequeña gota de sangre que nacía de su cabeza deslizándose por el contorno de su rostro. Se podía palpar el dolor en el ambiente, los invité a pasar, les di ropa limpia y, cuando ya estuvimos todos atendidos, ella ya se había limpiado las heridas y puesto vendas. y sentados al rededor del fuego, mi pequeña rompió el silencio, a su vez rompió en llanto.
- Lo siento papá, juro por Dios que lo siento. - Dijo mientras la estrechaba entre mis brazos, yo solo la observaba, en mi mente esbocé una sonrisa al pensar que estaba exactamente como cuando era pequeña y tenía problemas, no había cambiado. Cuando su llanto cesó, la mire a los ojos y pregunte suavemente:
- ¿Que ha pasado, pequeña?
- Ha sido Rubén papa, él ...-Intentó decir con voz rota.
- ¿Él te ha hecho eso? -Dije mientras pasaba la yema de mi dedo indice por el gran moretón que ella tenía situado en el ojo izquierdo, y otro pequeño en la mejilla.
- Sí...Esto...Em...
-¿Cuanto tiempo? - Interrogué yo con voz seca, casi sonaba molesta, pero la angustia no dejaba que diese esa impresión.
- ¿Que?- formuló ella ,confundida.
-¿Que cuantas veces te ha hecho esto?
-Muchas...pero- izo una pausa para respirar sonoramente- yo me lo merecía, papá, el no tiene la culpa, es solo que, hoy se le ha ido de las manos. Eso es todo, no pas...
- ¡Basta! -Interrumpí yo- Mayka Martín Casanovas, escúchame bien porque no te lo volveré a repetir. Nadie,repito, nadie, se merece lo que ese tipo te hace a ti.
-Pero papá...
-Pero nada ¿me oyes? Júrame que no volverás con el pequeña, júramelo por favor.
- Papá, yo lo amo y el a mi.
-No, cariño. Lo tuyo es una dependencia, no es amor, para el eres una posesión no un ser de compañía o una pareja, eres como un trofeo o un objeto más, entiéndelo joder.
-Ha sido una mala idea venir aquí, mañana nos irémos, gracias por todo papá, pero tu no lo entiendes- replicó ella mientras se levantaba para irse a la habitación que les había preparado.
-¡Maldita sea! ¡Eres tu quien no lo entiende niña! ¡El no te quiere joder, no te quiere! -Grité yo mientras ella cerraba la puerta de un portazo.

Simplemente no lo soporté más, y me acurruqué mientras mis lagrimas caían en un silencio que gritaba fuerte, muy fuerte. Raul seguía allí, me miraba sin decir nada. Admiré su valentía en mis adentros, como se podía haber callado todo esto, sin mostrar ningún signo de debilidad ante la situación. Manteniendo la compostura.
Reí en mi mente, pensando que era igual que su madre, y ella era igual que mi Yara.

jueves, 3 de octubre de 2013

Las Grietas De La Felicidad #2



1 de octubre de 2083
Barcelona, Cataluña

Ese día hizo frío, había algo en mi que me decía que algo va mal. Hacía unos días que no veía a Raul, me dijo que vendría, espero que así sea. Tenía esa sensación de que solo yo sentía frío, era viejo y ese era uno de esos días en los que me sentía débil.
De pronto un ruido irrumpió en la casa y salí de mis pensamientos. El timbre. Será Raul, fui a abrir y allí estaba. Mi hermoso nieto, otra de las valiosas muestras de lo bien que crié a mi hija, siempre me sentí más que orgulloso de él, pero nunca se lo decía, por miedo a que se fuese o a que dejase de ser quien era.
-Hola yayo- Dijo el con voz de disculpa
-Hola Raul, te he echado en falta estos días- Proclamé con la voz mas suave que pude articular.
-De veras que siento no haber venido, es solo que...pfff...tengo muchos exámenes y...
- ¡Basta! No hace falta que te disculpes, cada persona tiene su vida y tu tienes derecho de disfrutar la tuya al margen de mi, a demás, los estudios lo primero ¿si?
-¿ En serio no te molesta? - Preguntó él con voz esperanzada y dulce.
- Por supuesto que no, chaval, ahora siéntate, que tenemos poco tiempo y cuanto antes te acabe de contar todo antes me dirás el motivo de tu curiosidad.
-Está bien abuelo, si no recuerdo mal me estabas diciendo que no hablabais nunca, entonces ¿como llegó a ser mi abuela?
- Tiempo al tiempo chiquillo, tiempo al tiempo, ve y trae la merienda y luego hablamos.-Dije mientras él salía de la sala de estar para traer la merienda de la cocina, cuando volvió, nos sentamos en el sofá negro de cuero viejo delante de la chimenea.
- Esta bien Sr. Joan, ya puedes ir desembuchando.- Yo reí y me decidí a empezar .
- Tú abuela siempre fue una mujer que se hacía la difícil, la dura por así decirlo. Mi niña Yara lo pasó muy mal en su vida, en su juventud, no fue fácil la existencia para ella ¿sabes? Ella era muy valiente. Acabamos primero de la E.S.O con miradas momentáneas y rápidas que ahogaban miles de 'te quiero' pero ni uno solo dicho. Empezamos segundo el 13 de septiembre de 2013 y los meses pasaban y pasaban, el frío llegó cargado de una epidemia de resfriados. Ella, en vez de un resfriado, pilló una pulmonía. Y mira que es dificil cojer algo tan grave, eh. Me preocupé como nunca antes lo había hecho por nadie, la ingresaron en el hospital de San Pau 2 de Maig, en Vall d'Hebrón, pese a que me costo llorar sangre, convencí a mi madre para que me dejara ir a verla, si no recuerdo mal aquel día era un martes. Llegué y subí a la planta donde estaba ingresada ella, subí como si mi vida fuese en ello y allí la vi, estaba estirada en una cama, no estaba conectada a nada pero lo cierto es que nunca la había visto mas pálida que entonces. -Hice una pausa para reprimir el escozor de lágrimas y cojer aire- Me quedé en la puerta, observando como ella miraba con tristeza el techo, con esa mirada indescifrable que me mataba. De repente se giró y me miró, me quedé realmente sin aliento cuando me sonrió, me sonrió joder. Fue como si me hubiera tocado la lotería. Quise en ese instante declararme, darle un anillo y vivir con ella en un castillo, ella era mi princesa, ahora lo tenía claro, era ella, la mujer de mi vida. Me acerqué como un cervatillo se acerca al cazador y me sorprendí a mi mismo sonriendo, sonriendo como un completo incompetente sin cerebro. Quería besarla, solo Dios sabe cuanto quería besarla. Me senté en el borde de su cama sin poder articular palabra y ella tomó mi mano, sentí un escalofrío y después un cosquilleo que iba desde el centro de mi estomago hasta la punta de mis pestañas. Entonces ella, mientras me sonreía comenzó a soltar lágrimas. Entonces todo cambió y mi preocupación volvió a tocar la puerta, el cosquilleo se convirtió en una taladrante agonía que martilleaba en mi angustia de solo verla así. Fue en ese momento, sin saber de donde saqué el valor, me acerqué a ella y la abracé, ella se apretó contra mi cuerpo y sentí su dolor en lo profundo de mi ahogada alma. Me separé y le relaté todo, absolutamente todo lo que sentí por ella desde el primer segundo en que la vi. Ella solo me miraba atónita, como si mis palabras fuesen locuras. Entonces ella me miró, sonrió, y solo dijo 'Oh, Joan, yo siempre te he querido.' justo entonces, le robé el primer beso. Sus labios, cálidos y rosados, tan inocentes como su apariencia, se abrieron y nos adentramos en un profundo beso, el mejor beso de mi vida. Nunca jamás había besado a alguien. Pero supe que esos eran los únicos labios que necesitaba... Raul, lo vas pillando? -Dije observando su cara de bobo enamorado, la viva imagen de mi cara en otros tiempos ciertamente
- Sí, sí... Es solo que... Nunca pensé que llegarías a ser tan cursi abuelo- Espetó el mientras estallaba en carcajadas sonoras y marcadas. No pude contener mi risa tampoco.
- Óyeme bien chaval, que tu abuelo no es ningún pamplinas que se va con cursilerías ni cosas de esas. Tu historia de tu abuela y la mía es una historia única y debe ser contada bien.-Repliqué yo intentado parecer serio, se ve que funcionó porque su cara cambió drástica mente y dio paso a un rostro de culpa.
- De acuerdo, no pretendía...esto...em... -Balbuceó él, lo cierto es que lo suyo no eran las disculpas.
- ¡Es broma Raul! La verdad es que sí, siempre se me dio bien la cursilería cuando se trata de hablar de mi Yara.
- Abuelo, eso no vale. Me has asustado. A veces, das miedo, ¿Sabes?
- ¿En serio?
- Sí
- Oh, lo siento Raul, yo tampoco pretendía asustarte
- No pasa nada, ya son las ocho y media, debería marcharme, mañana tengo dos exámenes.
- Esta bien pequeño, vete, te espero pronto
- Dentro de dos días, abuelo. Dentro de dos días sin falta estaré aquí.
 - Entonces, hasta dentro de dos días Raul.

miércoles, 2 de octubre de 2013

Las Grietas De la Felicidad #1






28 de Septiembre del 2083
Barcelona, Cataluña.



Era una tarde cálida, el otoño junto al frío amenazaban en llegar, pero parecía no llegar nunca.
Era un día normal, yo con mi nieto, mi nieto conmigo realmente. El se llama Raul, tiene 16 años, me lo cuenta todo, es un gran chaval, yo ya estoy viejo, ya son 83 años que llevo marcados en cada arruga de mi cara.
Nunca le pedí que me hiciera compañía, fue el quien decidió compartir sus tardes con un viejo cascarrabias como yo.

Esa tarde, mientras merendábamos y charlábamos Raul y yo. El hizo una de sus preguntas sacadas de contexto:
- Oye abuelo, ¿quién fue tu primer amor?- Preguntó el inocentemente, yo solo lo miré sorprendido, lo cierto es que no me esperaba para nada esa pregunta de él ¿Para que querría saberlo?, justo cuando iba a contestar el añadió casi leyéndome la mente- Nunca te lo he preguntado y lo cierto es que tengo curiosidad.
- Escucha chico, mi primer amor fue la mujer que me trajo al mundo, y no hay mas que hablar.-Dije intentando evadir el tema.
- Abuelo, sabes de que hablo. Se que siempre has querido mucho a tu madre y eso, pero ¿y la abuela? ¿y las chicas antes de la abuela? ¿por que no buscaste otra mujer cuando la abuela murió? Vamos, nos lo contamos todo, por favor, explícamelo.
- Escúchame bien chico, nunca hubo antes otra mujer para mí antes de tu abuela, y tampoco lo habrá, quiero que sea así. Ella fue, es y será la única mujer para mi.
- ¡¿ Fue la pirmera?! - Exclamó el con una sorpresa que se podría notar desde la otra punta del mundo.
- Sí, y será la última. - Dije yo con tristeza.
Entonces, casi como si el futuro quisiese obligarme a recordar de nuevo, surgió de sus labios la pregunta mas dolorosa que se le podría haber ocurrido para decirme:
- ¿Como empezó todo? -Preguntó el con un halo de curiosidad reflejado en sus ojos.
- De acuerdo, te lo contaré. Pero solo si me prometes una cosa.
-Lo que sea.
- No cometas los errores que yo cometí, y cuando acabe, quiero saber el motivo real por el que quieres saberlo ¿Entendido?
- Sí.
- Bien, todo empezó cuando yo tenía 12 años
- ¡¿ Doce?! - Interrumpió él.
- Shhhhhhhht. Dejame hablar.
- Esta bien, esta bien...lo siento.
- No pasa nada, bien, ¿por donde íbamos? Ah si, todo empezó cuando era un piltrafilla como tú, bueno, mas pequeño, por aquel entonces, íbamos a empezar el instituto, si no recuerdo mal, era septiembre, 12 de septiembre. Aquel día todavía hacia bastante calor, recuerdo que al llegar al instituto nos hicieron ir al gimnasio, era grande, con un escenario y bancos enfrente para que nos podamos sentar, había ya algunos chavales allí y los profesores hablaban entre ellos subidos al escenario. Mis compañeros y yo nos sentamos en los bancos junto a los chavales, sin siquiera conocerlos, comenzamos a hablar. Entonces entró ella, tan eufórica como siempre, se veía la ilusión en sus ojos, grandes y verdes. Todas sus amigas se fueron sentando y ella lo hizo también, por un instante me miro y gire la cara, la iba mirando cuando pensaba que no se daba cuenta, pero la mire demasiado y ella comenzó a intentar que nuestras miradas se cruzaran, lo consiguió. Me sonrió y yo a ella, después se giro y me ignoró por completo. Entre tu y yo, que me ignorase me dolió un poco. Pasaron meses, y no hablé con ella. En ningún momento. Nos cruzábamos, nos mirábamos, sonreíamos y nos ignorábamos después. Siempre igual. Hasta que un día...

Justo en ese momento sonó el timbre, la madre de Raul, May. Mi hija, era el vivo recuerdo de su madre. Ella era una mujer hecha y derecha, se llamaba Mayka Martín Casanovas, justo como a su madre le hubiera gustado. Ella , a diferencia de mi Yara, tuvo a Raul muy jovencilla, a los 20. Por aquel entonces ya tenía 46 y estaba casada, el era un buen tipo, o como mínimo eso parecía.
Sumergido en mis pensamientos me olvidé de abrir y el timbre volvió a sonar. Abrí y allí estaba, mi siempre pequeña May. La saludé como de costumbre y prometí a Raul que el proximo día le seguiría contando más...



sábado, 28 de septiembre de 2013

Las cosas que valen la pena de verdad, no suelen ser fáciles.


Las vidas de muchas personas, se destruyen por el pensamiento repetitivo de ese '¿que hubiera pasado si..?' o ese 'Yo iba a hacer ...' .
A veces por un 'íbamos', otras veces por un 'iba' o por un 'hubierais'. No importa el verbo, ni siquiera importa la acción que hubiera tenido que venir después. Eso da igual. Lo único que importa es que no pasó. Que nunca ocurrió tal cosa. Y esa falta hace eco en tu mente. Esa voz que te pregunta '¿Que ibais a ser o a hacer?' '¿Donde quedo todo eso?' '¿Que hubiera pasado si las cosas hubiesen sido diferentes?'.
Esa voz que te trae imágenes imaginarias, imágenes bonitas acompañadas de un 'Mira, esto sería así si no hubieses hecho esto, o si hubieses hecho aquello otro'. 
Esa voz que se ocupa de que tu tranquilidad sea escasa, casi inexistente. Esa voz que se propuso destruir todo rastro de ilusión en ti desde que sonó por primera vez.
Es esa voz, la que se ocupa de recordarte lo bajo que estas cada vez que intentas levantarte, esa voz que te dice que no puedes, que nunca podrás aspirar a algo mejor. Nunca. Esa voz que hace que las nubes negras se multipliquen, esa que hace que tus sonrisas escaseen y tus lagrimas abunden. Esa que te dice que tu, en comparación a cualquiera, no vales una mierda. Esa voz que nunca estuvo allí cuando tu fuiste feliz, esa voz que se encarga de que te duermas llorando todos los días, esa puta voz que no te deja de hablar.
Esa voz que te hace pensar que es la única que nunca se irá y que es la única que realmente está siempre, esa jodida voz que te dice que es la única que realmente quiere hablarte, que nadie mas quiere saber nada de ti, y que si preguntan es por quedar bien.
Pero, ¿sabes que? Esa voz te miente, esa voz quiere que te arrastres, esa voz que te dice lo fea que eres, lo gorda que estas cada vez que te miras al espejo, esa que te dice que importa mas el numero de pantalón que llevas a el numero de visitas al psicólogo a la semana por falta de autoestima. Esa que te dice que da igual como lo hagas, pero que tienes que estar perfecta, pero nunca consigues estar perfecta ¿verdad? Nunca es suficiente porque esa voz sigue diciéndote que estas gorda, y que lo vas a seguir estando, que eres fea y que lo vas a seguir siendo hagas lo que hagas. Esa voz que te susurra al oído que estas totalmente sola, que a nadie le interesa como estás. Que nadie te quiere, que sobras. Esa voz, esa voz quiere que te rindas, que dejes de luchar por tus sueños, que dejes de sonreír, esa voz quiere destruirte ¿de veras dejarás que esa voz gane? ¿de veras estas dispuesta a dejar de intentar ser feliz? ¿Es que acaso no ves lo mucho que vales, pequeña? 
¿Es que acaso no ves que te mereces eso de ser feliz?
Abre los ojos, pequeña. Ábrelos, mírate al espejo y comienza a ver en ti todo lo que yo veo. Comienza a valorar lo que hay en ti, recuerda que tú y tu sonrisa podéis cambiar un estúpido día de lluvia, a una fiesta de agua. Puedes quejarte de que haya charcos y baches, pero puedes saltar en los charcos, ponerte patines, y jugar con los baches. Puedes llorar desconsoladamente porque él no te quiere, o puedes reírte de lo que ese pobre imbécil a perdido sin siquiera darse cuenta.
Recuerda que tú puedes hacer de tu vida, una vida mejor. Tal vez no te hagas mas rica sonriendo, tal vez no sea la solución a todo. Pero ¿sabes? dicen que solo cuando las nubes se van, puedes ver el sol, pero lo dicen solo por que no han visto tu sonrisa, cuando la vi yo, supe que el sol no tiene ni punto de comparación con tu sonrisa. Tú sonrisa es capaz de iluminar cosas que al sol le encantaría. 
Eres hermosa, princesa. Sois hermosas tú y tus ganas ocultas de vivir. Y lo cierto es, que es un poco egoísta que prives al mundo de una preciosidad como la tuya.
Mira,pequeña. Hazme un favor, a mi, y al mundo.
 Demuéstrale a esa voz que se equivoca y sonríe ¿de acuerdo? 
Se que costara, no digo que vaya a ser fácil. Pero te aseguro que vale la pena.
Las cosas que valen la pena de verdad, no suelen ser fáciles.

jueves, 26 de septiembre de 2013

R. I. P. Avalanna Routh, the best OLLG in the world.

- “Me desperté, era un día normal como otro cualquiera. Hoy íbamos a ultimar todo lo relacionado con el Tour ya que el sábado comenzamos. Me desperté a las 10:00 a.m, Kenny estaba raro y Scooter también. Todo eran silencios. Yo no sabía que estaba pasando. Kenny se acercó a mí y me dijo que tenía algo importante que contarme. Algo serio. Yo le pedí que me lo contara. Carraspeó su voz y me dijo: Justin, como ya sabes Avalanna estaba muy mal. Y bueno…hoy, amaneció muerta. En ese momento todo se paró. Las piernas me temblaban y tenía unas ganas inmensas de llorar y gritar. Les pedí por favor a Kenny y Scooter que se fueran y me dejaran solo. Abrí mi móvil y comencé a ver sus fotos. ‘Mi ángel’ pensé al ver una foto suya conmigo. Sentía impotencia. Ella no lo merecía. Estaba luchando por ganar la batalla. Me siento mal y la echo de menos. Pero por lo menos me consuela saber que cumplí su sueño y que la hice feliz en sus últimos meses de vida.” -Justin Drew Bieber Mallete.


sábado, 21 de septiembre de 2013

Que nada es nada hasta que te delatan las circunstancias.


Y de repente, casi sin darte cuenta, te das cuenta de que todo ha cambiado. Que las personas que antes no faltaban hoy sobran, que las personas que sobraban hoy están siempre. Que te pasas horas intentando decir una palabra a personas con las que antes te desvelabas hablando. Que ya no es felicidad, ahora es soledad. Que ya no son amigos, ahora son desconocidos. Que pones los cascos a volumen nivel: Dios, solo para sentir que ya no formas parte del mundo. Solo para imaginarte a tu madre saliendo de la habitación, o saliendo de la cocina con una sonrisa de oreja a oreja, diciéndote que ya no hay mas problemas, que ya se acabó todo, que ya no hace falta que reprimas lagrimas, que todo irá mejor, de verdad. Todo irá mejor, ya verás...
Que ya no son las ganas de tus 'te quiero', tío. Ahora con un puto abrazo de cualquiera ya me basta . Que ni necesito alguien que me chupe el culo,ni que me vaya detrás, tampoco necesito a un príncipe azul, ni a un gilipollas que me enamore para desilusionarme después. Solo necesito a un par de personas, dispuestas a escucharme, o a darme abrazos acompañados de lagrimas sin ni una sola palabra, ni una sola explicación. Solo necesito despertar sin ojeras,sin cortes, que solo necesito que las cosas vayan bien joder. Que no le he pedido nada a nadie, no he pedido la luna, ni siquiera pedí nada por mi cumpleaños por si era mucho, o no me lo podían dar. Que solo necesito una puta sonrisa en mi cara, una sincera joder, una. Ni dos, ni ocho, una. 
Necesito que las palabras 'todo va a salir bien' vuelvan a significar algo.
Quiero liar los problemas, encender felicidad y aspirar una nueva vida. Quiero que todo vuelva a ser como antes. Quiero sentir algo, cuando veo a alguien llorar. Quiero ser la pequeña encantadora que un día fui. Quiero que la simpatía me salga por las orejas. Quiero ser feliz ¿mucho pedir? no lo creo.
Joder, que no tienes ni idea de las veces que me habré imaginado una vida mejor, imaginarme como sería la vida si al despertarme todo hubiera terminado, poder darle un beso a mi madre sin notarla extraña y distante, sin por la noche escuchar cosas que no debería, sin estar pendiente del móvil por si a 'él' se le ocurría hablarme. Ese día en el que todo cambiaría, en el que Soledad decidiese irse, en el que Rencor me dejase pensar claro, en el que Tristeza dejara en paz a las lagrimas que salen de ojos rojos y hinchados. Pero ese día no llega. 
Mis ojos cansados de ver injusticias, mi mente harta de decepciones, los dos hartos de ver como me autodesruía solo por vergüenza a hablar, a decirle al mundo que ya puede parar de joderme. 
No tienes ni idea de las veces que lo intenté tío. Te juro por mi vida que intenté hablar, intenté contarle a alguien todo lo que por mi mente pasa, intenté destruir este envoltorio de hojalata. Pero no pude. 
Las miradas de la gente mientras hablaba, esas miradas de compasión que me matan, esas miradas que se les hacen a gente sin esperanza alguna, ese tipo de mirada que abunda en los hospitales, esas miradas de 'no se lo que sientes, pero siento mucho tu situación'. Mentira, ellos no sienten nada, tú no sientes nada. Solo yo. Solo yo siento mi vida. Solo yo se porque me hago lo que me hago y porque me siento como me siento. Aun que a veces ni yo me entiendo.
Nunca dejé de respirar, no hubieron ovarios para dejar de hacerlo por voluntad, pero deje de a esto llamarle vida hace mucho, simplemente deje de vivir. Deje de soñar y perdí mis ilusiones por el camino oscuro en el que sigo caminando, sin mirar atrás por miedo a recordar de nuevo cosas peores, tampoco miro a los lados porque se que ya no hay nadie, y aunque lo hubiera, la oscuridad no me dejaría ver nada, creo que me perdí hace tiempo.
 La primera vez que me encerré para llorar en silencio no es mas que un recuerdo borroso de hace mucho tiempo, tiempo en el que apenas florecía el remordimiento. 
Tu no sabes lo que es eso de ver a tu propia gente pasando hambre, ver a tus seres queridos caminar con miradas perdidas, ver a tu madre llorar sabiendo que llegará a fin de mes, pero sin dinero en los bolsillos.
Tú no sabes lo que es sentirte culpable incluso por pedir tiempo, solo porque algo estás pidiendo.
Tu no sabes lo que es llegar a casa y decir '¿que hay hoy para comer?' y que te contesten un 'no se' con voz áspera, seca,  fría y cansada, casi como si molestaras hasta en tu puta casa. No sabes lo que es sentirte indeseado, no sabes lo que es querer pudrirte en cualquier lado, no sabes lo que es aguantar todo eso y muchas cosas mas que te dejarían atónito, en la tele lo llaman 'situaciones difíciles', en las calles los llaman 'muertos de hambre' o 'pobres' sin mas. 
Y que vale, que a mi en mi puta vida me han llamado eso, pero ¿sabes por que no? porque mi madre se rompía el culo porque no se notara una mierda, porque fue ella quien miraba mis muñecas con tristeza y me sonreía en lo mas hondo mientras todo se iba a la mierda.
 Ella, se rompió la espalda y el corazón por tener algo de fe, en que todo iba a ir mejor.
Ella, ella para mi es mi heroína, y pobre de aquel que a ella la subestima. Nunca me faltó de nada porque todo lo que tuvo me lo dio, y todo lo que le faltaba de algún modo consiguió.
Y que vale, que el dinero no es nada, a menos que te falte. Que la vida no es nada, a menos que ya no tengas. Que solo respires. Que el amor no cuenta, hasta que te enamoras de la persona equivocada. Que eres fuerte, hasta que las lagrimas escuecen en los ojos rojos. Que nada viene hasta que llega. Que el tiempo, la edad y la distancia son solo números, números que cierran puertas y ventanas y te encierran.
Que nada es nada hasta que te delatan las circunstancias.



viernes, 20 de septiembre de 2013

Hermanas para siempre,¿Recuerdas?


A ver, dime que es lo que hice tan jodidamente mal como para que tu te fueses, ¿eh? Que dije que te dolió tanto como para dejarme aquí, sola. Solo te fuiste, solo me dejaste, si explicaciones ni nada. Tu y yo lo eramos todo, ¿recuerdas? hermanas. Prometimos y nos propusimos poner un ocho tumbado al lado de nuestros estúpidos y divertidos motes. Nos prometimos que nunca nos olvidaríamos de que nos teníamos mutuamente. Me lo prometiste joder, lo hiciste. Me dijiste que siempre te tendría, que siempre estarías a mi lado, que aunque me fuese, que seguirías leyendo mis miradas destrozadas mientras sonreía. Que seguirías abrazándome sin decir nada, solo por que sabes que  me cuesta contar mis cosas. Que te comerías mis insultos cuando estaría de mala leche y que después, seguirías estando conmigo,apoyándome, aguantándome y haciéndome reír en los momentos mas difíciles, que seguirías siendo mi hermana, pasase lo que pasase. Pero las cosas se torcieron ¿no es cierto? yo soy la que me fui, lo se. Pero fuimos las dos quienes nos prometimos la una a la otra que ese para siempre se cumpliría.
A veces, las cosas que mas valen la pena, son las que están lejos, las que aunque tengas, cuesta mantener. Yo siempre he sabido que esta amistad vale la pena.
Te echo de menos, pequeña. Te echo mucho de menos. Y me jode, ¿Sabes? antes, me preguntaban '¿Y quien es ella?' y yo soltaba una maraña de cursilerías solo para recalcar que eras mi mejor amiga. Solo para decirle al mundo lo maravillosa que era mi hermana, mi todo. Ahora, cuando me preguntan, ya no se que responder, no se si seguimos siéndolo o no, no se tú, pero una amistad no se basa en llamar 'MA' a una persona y ya. Una amistad, nuestra amistad, era enorme, y me jode que se haya reducido a esto. A dos o tres palabras secas y frías por un chat cada 20 o 30 días. Que antes, cuando yo caía, tu te reías en mi cara, pero me ayudabas a levantar y me decías algo como 'Que,¿el suelo se siente solo y vas a abrazarlo?' y yo contigo hacía igual. Zipi & Zape , ¿te acuerdas? yo no lo olvido. No olvido tu forma de hacerme ver que la vida no es solo ser seria, que gracias a ti comencé a reír y a saber disfrutar, que risas como tu, no me las saca nadie joder, nadie.
Ya no se nada. No se que somos. Se que eramos hace un año, hace unos meses se que fuimos ayer, pero no que somos ahora. Se que tú eras mi todo en medio de la nada, que yo no era nada si tu no estabas en todo.
 No olvido tus abrazos cálidos en mis fríos momentos, no olvido tu forma leve de sonreírme mientras las lagrimas corrían por mis mejillas, mientras mis esperanzas morían tu eras ese milagro que las resucitaba.
Que tu a mi me conoces mas que yo misma, que yo a ti te entiendo mas que tu misma. Que no me puedo creer que ahora parezcamos desconocidas. Llámame loca pero, me duele que muchos de los que me dijeron que nunca me olvidarían hoy ni me hablan, pero tu silencios  largos después de mis 'hola' ,eso me mata.
Y ¿Sabes? me dan envidia las personas que te rodean, que están cerca de ti y te pueden decir eso de '¿Quedamos mañana?' un día cualquiera. Porque yo ya no puedo. Me dan envidia todos aquellos que te ven cada mañana con cara de dormida, todos aquellos a los que cuando no te enteras de algo en clase, te puedes girar y preguntarles. Antes yo formaba parte de aquellos, y no sabes lo bien que sentaba.
Y joder, que me da miedo perderte del todo, que me da miedo de que un día pienses que ya no estoy y me olvides, te busques a otra mejor amiga, otra a la cual le confíes lo que me solías confiar a mi. Que encuentres a alguien mejor que yo, con mejor carácter y que esté cerca tuyo. Que yo por ti lo daba todo hermana, tu lo sabes joder, deberías tenerlo claro.
Que la distancia, la edad y el tiempo son solo números, y quiero que entre nosotras sea así. Tu mi princesita y yo tu consejera. Siempre, ¿vale?
Te quiero, Twin.

Intereses:


Mi único interés en esta vida,
es sacar provecho a mi imaginación día a día,
ya que el tiempo pasa muy lento desde que llegó tu partida,
no tengo ambiciones ni esperanzas,
vivimos todos en un mundo lleno de matanzas,
y yo aquí escribo como engaño,
intentando no hacerle a mi cerebro tanto daño,
y sigo aquí, 
en mi mundo particular,
que nadie me va quitar,
que siempre me va quedar,
tu jodido recuerdo sentado en esa silla,
plasmado en cada pared en cada cortina, y que coño?
ya no se distinguir entre el amor y el odio.
No critico solo retiro mi apoyo,
a este puto mundo que se oxida, cada letra en esta pagina es una vida perdida.
No soy nadie para decir nada acerca de la sociedad, 
pues formo parte de ella.
Tan solo digo, que podríamos esforzarnos para que fuese mas bella.

jueves, 19 de septiembre de 2013

A veces, hace falta caer bajo.


Y entonces, cuando las cosas ya no pueden ir peor. Van peor. Discusión tras discusión, problema tras problema, insulto tras insulto. Solo queda aguantar. Aguantar esas ganas de llorar, de enviarlo todo a la mierda y gritar. Gritarle al mundo que ya no puedo mas, y suplicarle que no sea tan duro. A veces piensas que el mundo te tiene sobre-valorada, que espera demasiado de ti, que ya no puedes mas. A veces simplemente te limitas a esperar, a sentarte y ver como pasan las cosas sin decir nada. Tan solo observas, sin dar ninguna pista de todo el remordimiento. Te levantas por rutina y te acuestas por un cansancio constante. Duele ver como para algunos la vida es tan fácil. Cuesta tener que decir día a día que estas bien, que eres feliz, cuando realmente, solo buscas a alguien que sepa descifrar los gritos que oculta tu mirada. Esa mirada triste, ahogada, esa mirada que hace mucho tiempo se cansó de llorar.
Y aunque duela, cueste y frustre, sacas tus mejores sonrisas, haces como si ya no pasara nada, como si cuando volvieses a casa los problemas no existiesen.
Que hay días que sales a la calle mientras te escuecen las lágrimas en los ojos, pero no sabes como lo haces, pero siempre te las ingenias para que nadie lo note.
Que cuando vuelves a casa y ya no aguantas te encierras en donde seas y lloras. Que te haces mil y una heridas en los brazos para no pensar tanto en esa vida que te espera fuera, si es que se le puede llamar vida.
Por una parte piensas que te mereces todo lo que te esta pasando, pero por otra parte se te ocurren a mil personas con vidas excelentes que se merecen lo mismo que tú estas pasando ahora. Te jode ¿A que si? Lo sé, te entiendo.
Sueltas risas amargas mientras te das cuenta de que a veces los problemas no solo se limitan a la vida social, al chico que te trae loca, o a tu mejor amiga. No. A veces los problemas vienen por otro tiro, y no puedes contarlos. Básicamente porque te da vergüenza y prefieres no decir nada. Aun que sabes que eso es peor para ti.
Te cuesta pensar en positivo, porque todo va cuesta abajo. Miras tu camino y ves una bajada sin fin, y te amargas. Te vuelves fría, te vuelves antipática y tus sonrisas sinceras son solo recuerdos borrosos de tiempos mejores.
Se que estas cansada de todo esto, se que ya no puedes mas y que te jode que no te quede otra que seguir bajando y bajando. Que estas cansada de comerte marrón tras marrón. Que estas cansada de tu vida. Que ya no puedes mas. Que cuanto mas te hundes, mas te ahogas.
Se lo que se siente, pero ¿sabes? cuando la cuesta abajo termina, y estas en lo mas hondo de lo mas hondo, es cuando ves luz. Y a veces, hace falta caer muy bajo, para llegar muy alto, y así, valorarlo.

miércoles, 18 de septiembre de 2013

Por que tú y tu vida, valéis mas que el mundo entero.



¿Sabéis? Estoy cansada, cansada de escuchar a gente quejarse y quejarse de su vida. Publicar todo tipo de frases en redes sociales diciendo que su vida es una mierda. Pero ojo, que tampoco hacen nada para remediarlo, ni siquiera un poco. Me sorprende que haya chicas que me hablen, y me digan que su vida no vale nada, tan solo por que ese gilipollas que la tiene loca, la ignora. Que se corten los brazos, vomiten después de comer y que lloren a todas horas. Que al verlas cada día, siempre tienen los ojos hinchados, la mirada perdida. Es horrible hablar con gente esplendida, con vidas que dan asco. Y gente que da asco, con vidas esplendidas.
En realidad me duele, me duele cuando la gente dice que su vida es una mierda, porque yo pienso '¿Y entonces la mía?'. Jode ¿Sabéis? Jode mucho.
Me causa impotencia, y en el momento en el que lo escucho me invaden las ganas de decirle al mundo lo ingratos que somos los humanos. No tengo la vida que quiero, tampoco quiero la vida que tengo. Pero, sin embargo, sonrío igual. Me imagino como sería cambiarme por esa persona en ese momento. Daría lo que fuera por que entendiesen lo que es realmente una 'vida de mierda', yo no tengo una de esas, porque me consta que podría ser peor. Pero no tengo una vida deseable para nadie, ni una personalidad envidiable ni nada por el estilo. Tan solo me dedico a vivir, a conformarme, no es mucho lo que tengo, pero no me falta de nada.
Es increíble cuanta gente dice estar a tu lado. Pero cuando caes, nadie te levanta. Y si tú mismo no haces el esfuerzo por ponerte en pie de nuevo, vivirás tu vida pegado al suelo, dejando que te pisen, y te pase por encima quien quiera.
Cortarte: no va a solucionar las cosas, tal vez calme el dolor durante un rato, pero después todo vuelve, y vuelve peor.
Vomitar: no te va a hacer mas guapa, ni mas popular, ni va a callar a todos los que se meten contigo, siempre, y escúchame bien, siempre va a haber alguien que critique tu físico. Solo por el hecho de creer que el suyo es mejor, pero no. Nadie es mejor que nadie.
Llorar: puede ayudarte a desahogarte y eso, pero, ¿y luego? Se trata de llorar, gritar y patalear si hace falta, pero después sacudir el polvo de tu ropa y levantarte poco a poco mientras tus heridas cicatrizan. No se trata de llorar, y llorar , y llorar. De eso no va la cosa, de eso no trata la vida.
No trato de cambiar tu forma de ser, ni de insultar tu forma de evadir los problemas, solo quiero que te des cuenta de que no es la mejor manera, hay otras formas, ¿sabes?
Piensa en lo que cualquier niño que muere al nacer daría por vivir el tiempo que tu vives, es mas, ese niño, daría lo que fuera por un solo segundo mas, ¿y tu? Tu te quejas.
Y ahora dirás eso de 'Pues preferiría no haber nacido', ¿realmente lo prefieres? Recuerda la ilusión de tu primer cumpleaños o la primera vez que se te cayó un diente. ¿Recuerdas eso? Por aquel entonces eras feliz, ¿Porque no ser feliz ahora? Te lo mereces. Te mereces ser feliz.
Mi madre solía decirme que 'Si tienes problemas y tienen solución ¿para que preocuparse? Las soluciones vendrán. Y si tienes problemas y no tienen solución ¿Para que preocuparse? El problema seguirá allí.'
No es una frase de película ni nada de eso, pero verdad tiene mucha.
Imagínate-lo: una persona triunfante, que tiene que explicar su historia al mundo, que se valora más, ¿a una persona que las ha pasado putas o a una que lo tiene todo a mano?
Si llegaras a esa situación, te valorarían mas a ti.
Dime, ¿a cuantas personas has echo sonreír? ¿Cuantas veces te has sacrificado para ayudar a otros? ¿ Cuantas veces has consolado a una persona, y la has hecho sentir mejor?
Cariño, eres una de esas personas, que en el mundo hay pocas, y si tu te vas, si desapareces, habrán menos aún, y en algún lugar del mundo, se que hay alguien que se muere por conocer a alguien como tú.
Y solo por eso, vale la pena vivir.

lunes, 16 de septiembre de 2013

Un 'nosotros' en mi historia. Solo pido eso.

Y entonces es cuando llegas tú. Llegas tú y rompes todos mis esquemas. Todas mis espectatívas acerca de lo jodido que es el mundo. Entonces te miro, y albergo la esperanza de que en esta mierda de mundo, tal vez y solo tal vez, algo bueno hay. Algo o alguien como tú. Joder, esa sensación de volver a sonreír después de tanto. Se me hace raro tenerte, y siento que soy un error a tu lado. Me siento un poco egoísta y tal por todo eso, porque creo que te mereces a alguien mejor. Pero he aquí el problema, no quiero que estés con alguien mejor, quiero que estés conmigo. Entiéndelo joder, entiéndeme. Entendámonos juntos. Los dos. Eso es lo que quiero. Tío, que te echo de menos dos horas antes de que te marches. Que el olor de tu perfume se me hizo adicción y que como tus besos no creo que encuentre nunca otros. Que con cada caricia matas un puto problema. Solo quiero que esto deje de ser un tu y yo y empiece a ser un nosotros, y que se quede así para siempre, que lo único que quiero es quererte todos los días de mi vida y sentir que tu me quieres también. Que si, que soy una insegura, una niñata, una egoísta y una infantil, pero quiero que me quieras, así. Tal y como soy.
Te quiero, ¿Vale? Te quiero como nunca he querido a nadie, como nunca me he atrevido a querer a nadie. Contigo he comprobado que es posible querer a una persona mas que a uno mismo. Porque tío, yo a ti te quiero más que a mi misma. Y que si no te llamo mi vida, es por que joder. Sería un insulto compararte con esta mierda. Pero oye, que me sobran palabras y me faltas tú. Me faltas tú y tu manera de asegurarme que todo va ir bien, que nosotros vamos a ir bien. Que tú y tus tonterías me hacéis feliz joder, que tu y tus palabras me hacéis sonreír. Sois lo único que me hace sonreír y poder comerme esta mierda que tengo por día a día. Me haces sentir que vale la pena comer la mierda que tenga que comerme, solo para verte, cinco minutos aunque sea. No importa. Solo verte, eso es lo que me llena. A mi lo que me llena es verte, verte feliz, verte sonreír cuando me miras. Que si fuera por mi, tu nunca mas besarías, mirarías ni abrazarías a nadie mas que no sea yo. Que si fuera por mi, te cambiaba tus inseguridades por besos. Te cambiaba miradas tristes por caras de tonta cuando te miro. Que cambiaba cada insulto por motes graciosos, princeso. Te cambiaba problemas por abrazos y te los pintaba de colores si hacía falta.
Joder, no se como hacer que me entiendas, porque ni yo puedo entender este torbellino de cosas que siento por ti. A veces creo que esto no es normal, ¿Sabes? tengo miedo de acabar por obsesionarme con tu sonrisa. 
Cariño, quiero pasar el resto de mis días contigo, quiero contarlos uno a uno, hasta que pierda la cuenta, y entonces volver a empezar. Quiero un futuro joder. Un futuro contigo. 
Quiero que de mayores nos independicemos juntos, tu cumplas todos tus sueños y yo pueda cumplir los míos, pero siempre juntos. Quiero que nos compremos una casa en la playa, que tengamos críos, y que cuando seamos viejitos, salgamos al porche a mirar el mar, a simplemente pasar el tiempo juntos. Hasta el fin de nuestros días, amén. 
No me preguntes el porque, ni el como. Porque no lo sé. Solo se que un te quiero se te queda pequeñísimo, cariño. Y dudo que en un futuro te llegue a quedar bien.  
Un 'nosotros' en mi historia. Solo pido eso. Por favor.

Recuerdo que son recuerdos.

Recuerdo tantas cosas, todo lo que sentía, recuerdo incluso lo que no sentía. A veces me sorprendo de mi misma, de como algo que me hizo tanto daño, es también aquello que al recordarlo, me hace sonreír, me da fuerzas de algún modo.
Recuerdo nuestro primer día, lo extraña que me sentí cuando me abrazaste por la espalda, y me dijiste que me querías al oído. Recuerdo el escalofrío que tuve entonces, esa corazonada que me decía que todo iba a salir bien. Recuerdo también lo segura que me sentía. Recuerdo nuestro primer mes, nuestra primera discusión por tonterías, también recuerdo lo fácil que se me hacia perdonarte cuando me sonreías. Tengo nuestro primer beso guardado con llave en la memoria, al igual que tu olor, al igual que las palabras que me decías cuando creías que no te escuchaba. Recuerdo tu cara la primera vez que me viste llorar.
Recuerdo tu forma de enamorarme cada día, solo tú sabias enamorarme así. Solo tú puedes enamorarme así. Recuerdo cada momento juntos, cuando te pegaba porque me hacías cosquillas, cuando jugábamos como críos, cuando te reías de mi y nos insultábamos mutuamente y después nos comíamos a besos ¿Qué digo a besos? Podíamos comernos con tan solo la mirada.
Todavía recuerdo la primera vez que tuve celos de otra, cuando te lo dije, y como me aseguraste que yo era la única para ti mientras me abrazabas. También recuerdo que solías ponerte celoso cuando me acercaba a otro o cuando pasaba mucho rato con mis amigas en vez de contigo. Cuando te miraba y veía en ti esos celos y me reía en tu cara de ellos, pero a la vez me preguntaba como podías estar celoso con lo mucho que yo te quería. Con lo mucho que sigo queriéndote. Hay días en los que me sorprendo a mi misma sonriendo por la calle, recordándote con cada paso que doy, con cada tontería que veo.
Me acuerdo de lo pesada que era cuando hablaba de ti, nunca me cansaba de hacerlo, nunca me cansaba de decir lo poco que te merecía y la mucha suerte que tuve de encontrarte. No tienes idea de lo que significabas para mi.
Pero entonces llega ese momento, ese jodido momento. Recuerdo que son recuerdos. Y entonces se jode todo.

viernes, 13 de septiembre de 2013

¿'Que 'que me pasa'?

-Oye,¿que te pasa?
+Nada, déjame en paz ¿Vale? Sólo vete.
-No pienso irme hasta que me digas que coño te pasa. 
+¿De veras quieres saberlo? Porque si solo lo dices por que te doy pena, puedes irte ahora mismo.
-No, quiero saberlo. Joder, quiero saberlo todo, hace mucho que no te veo y que me trates así...
+Que te trate así ¿que?
-Pues joder, molesta ¿sabes? ahora, me explicaras que significa todo esto ¿o que?
+Mira, comencemos por donde lo dejamos. Bueno, mas bien por donde me dejaste tú. ¿Sabes una cosa? Desde que decidiste pirarte sin ninguna explicación, dejándome con cara de tonta, con esa misma cara de tonta con la que te miraba siempre, todo comenzó a salir mal. Comencé a hundirme, y lo cierto es que me impresiona recordar lo rápido que lo hice. Pasó que tus miradas indiferentes, a las que yo respondía de la misma manera, realmente me mataban. Y joder si dolían. ¿Tienes alguna idea , de lo que me costaba verte reírte y divertirte, que pasaras por mi lado y que me mirases con cara de asco? ¿Sabes lo que dolía eso? No. No tienes ni idea. Y por mas que te lo explique nunca sabrás lo que se siente. Y espero que nunca lo sepas. Chico, que estar sin ti fue y sera siempre una puta tortura. ¿Realmente pensaste que te olvidé? No.
Nunca lo hice. Dudo que lo haga, jamas. La comida comenzó a repugnarme, la gente también. Toda mi felicidad se comenzó a detener y estaba sola, sola y vacía en una habitación que siempre me parecía fría. Comparada con tus abrazos todo estaba helado. Comparado con tus besos todo me sabía mal. No tenia fuerzas no sabia, no tenía ni idea de como comenzar. Tío, no tienes ni idea de las sonrisas falsas que saqué de lo mas profundo de mi, solo por orgullo. No sabes cuantos permisos para ir al baño en medio de clase para llorar pedí. No tienes idea. En mi casa todo iba mal, me comencé a rallar pero no solo en la cabeza. Sigo teniendo marcas en los brazos. Ya no duelen, solo duele el recuerdo. No sabes lo que habría dado por un miserable abrazo tuyo, por una mirada con cariño o tal vez un simple 'hola'. Me pasa que estoy muerta, respiro pero a los sentimientos hace rato que les cerré la puerta. Me volví fría, soy fría ahora. Soy incapaz de ser simpática como antes lo era y eso me jode. He intentado olvidarte de todas las maneras posibles, incluso he salido con otros chicos, pero siempre salia mal. Siempre la cagaba, siempre me iba, antes de que ellos se fueran como hiciste tú. Y no tienes ni idea, de lo que habría pagado por mantener otra pelea contigo, si, incluso una puta discusión bastaba para hacerme feliz, porque al fin y al cabo, estaría cerca tuyo ¿no? ¿Y sabes que era lo peor? Que yo siempre me enteraba de todo lo que tu hacías, que si tu te caías yo me enteraba, que si tu te levantabas yo lo sabía. Que te miraba de lejos siempre, solo para saber como estabas. Me dolía cuando caías y me alegraba cuando lograbas levantarte. Agonizaba mas y mas cada vez que te veía hablar con otras, me daban envidia, porque antes pasabas de todas, 'me tenías a mi' decías, decíamos. ¿Que 'que me pasa' ? Me pasas tu, me pasa todo por encima joder. Me he vuelto una pequeña amargada, arisca y hostil. Me pasa que el mundo me supera y estoy cansada ya. Cansada de hacerme la fuerte, cansada de ya no poder verte, y que ahora me vengas con esa cara de tonto que siempre me ponías me derrite. Me hace ponerme cursi y comenzar a vomitar chorradas de color rosa, como cuando estaba contigo. Me pasa que tengo miedo, que tengo miedo de que me vuelva a pasar lo mismo, de que esa cara tuya de tonto se me vuelva a hacer habitual, y después, cuando todo se acabe, volver a pasarlo mal.

Eso me pasa. 

Y que a partir de ahora, todo va a salir bien.


Veréis, a veces, y solo a veces, todo sucede como planeamos. Normalmente imaginamos nuestra vida entera, imaginamos miles de situaciones que esperamos con ansias que pasen, pero no pasan. Ese 'hola' que nadie dice, ese mensaje que nunca llega, ese día del que nadie se acuerda. Y entonces ya no vives, tan solo pasan los días, cada año te auto-convences de que las cosas van a salir mejor, pero no. Hasta que te cansas, es entonces, y solo entonces, cuando la luz de esperanza se apaga, simplemente dejas de aspirar a llegar a algo mejor, ni te hundes, ni avanzas, simplemente te estancas. Esas palabras de esperanza que siempre te dicen tipo 'cariño, ya veras como a partir de hoy todo va a salir bien', ya no significan nada para ti, ya no tienen sentido alguno. Comienzas a levantarte por rutina, comienzas a perderte de muchas cosas que , tal vez, el año pasado, o el mes pasado, te habría encantado apreciar. Pero ya no. Las cosas han cambiado, ¿no es cierto? Ahora tu tienes más 'experiencia'. Ahora ya no te diviertes con las tonterías que antes te hacían reír hasta llorar. Y es entonces cuando te auto-atrapas y te dices a ti mismo que allí, donde estas, estas mejor. Pero ¿sabes? Gracias a eso, el día de mañana seras inmune, es como si te pusieran una inyección, una vacuna, entonces cuando llega la enfermedad, ya no hace efecto, tal vez un poco, pero no sientes casi nada. Y eso te jode, porque por un lado piensas 'Joder, esta debería haber sido la primera vez que me sintiera así' pero no lo es, pero por otro lado piensas la suerte que tuviste, la suerte que tienes, porque gracias a todo aquello que pasaste, hoy eres fuerte. Hoy tienes la cabeza alta. Hoy, hoy eres una gran persona, realmente, siempre lo has sido, solo que tu no lo sabias. Hoy te das cuenta de todo lo que te has perdido por madurar rápido y te molesta saberlo, pero te alegra que hoy por hoy puedas disfrutar de otras cosas. No se, tal vez solo me pasa a mi. Tal vez no tengo razón y para los tres o cuatro gatos que puedan llegar a leer esto, no tengan sentido. Pero tal vez, y solo tal vez, tú le encuentres algo de sentido a mis palabras, tal vez te haya pasado algo parecido o estés pasándolo, pero oye, escucha y piénsalo, si todo lo que podría haber salido mal, ya ha salido mal, ahora no hay otra de que todo vaya cuesta arriba. Tú iras cuesta arriba, y miraras a los problemas por encima del hombro, lo sé. Y en el fondo, tu también lo sabes. 

miércoles, 11 de septiembre de 2013

Att: El Mundo.



Bien pequeña, quiero que me escuches ¿vale? Quiero que prestes atención y que mis palabras se queden grabadas en tu mente, que  no las olvides, ni tu, ni esas lagrimas que amenazan salir en cualquier momento. Quiero que te las saques antes de que salgan , para que así no te empañen los ojos y leas lo que quiero decirte.
Que no importa cuales sean tus problemas, si son sociales o familiares, que da igual. Quiero que sepas que desde aquí, desde donde estoy yo, aún sin conocerte, se que eres fuerte. Quiero que sepas que aún que tú no lo sepas, que hay mucha gente dispuesta a escucharte, yo la primera. Quiero que dejes de rajarte los brazos, quiero que dejes de vomitar después de comer, quiero que dejes de llorar a solas todas las noches sola, asustada. Quiero que lo dejes todo, que salgas al mundo y grites todos tus males,acabes con un 'y me da igual, porque soy fuerte' y después te lo comas. Quiero que dejes de llorar mientras te miras al espejo, porque ¿sabes? son las lagrimas las que te empañan la vista y no te dejan ver lo maravillosa que eres, quiero que dejes de estar pendiente de lo que te dice la bascula, quiero que lo único que importe que suba sea tu autoestima. Quiero decirte que nadie puede pasar por encima tuyo, simplemente porque ,aunque tu sientas que no, nadie puede pasar por encima de alguien tan grande como tú. También quiero que te quede claro , que tu vales muchísimo. Que sea la que sea tu situación, que debes ser fuerte, porque el mundo nunca te dará nada que tu no puedas sobrellevar , y si a ti te ha dado todos los problemas que te ha dado, tienes que sentirte afortunada, porque cariño, eso quiere decir que eres una guerrera y tienes que comportarte como tal. Quiero que esas heridas de tus muñecas cicatricen y se conviertan en tus marcas de guerra, que comas tu comida favorita después de mirarte al espejo, dar una vuelta y pensar 'joder, que hermosa que soy' porque realmente, lo eres princesa. Que si el gilipollas de tu novio o el chaval que te mola no te quiere o te ha dejado , que si tus compañeros de instituto te marginan, que si te insultan, que si te pegan, que si te hacen daño. Todo eso es porque ellos no son ni la mitad de valientes que tú. Ni lo serán nunca.Que ellos lo que intentan es pasar por encima de ti, porque saben que no pueden. Quiero decirte que tú eres fuerte, eres valiente, que no importa lo grande que sea la situación, tú eres mas grande. Y lo sabes. Quiero que te mires al espejo y te des un beso a ti misma, que salgas, que ligues, que te maquilles si así te sientes mas guapa. Comprate tacones, y sal con ellos puestos, pisando fuerte, dejando huella en cada corazón que pises. Quiero que por cada lagrima te salgan mil sonrisas, que tu risa sea lo que mas suene en las conversaciones, pero no risas de las que haces ahora, quiero que sean sinceras. ¿Y sabes una cosa? Creo que he acertado si te digo que tu también quieres todo eso. Quieres sentirte mejor, que los problemas pasen ¿no es así? Y si los problemas se quedan, y no pasan, pasa tú por encima de ellos, porque si dejas de encurvarte, te pones recta, y miras hacia abajo, veras lo pequeños que son en comparación a ti. 
Oh pequeña, pequeña gran princesa. Tan solo quiero dejarte claro, que el mundo se siente afortunado de tenerte en él. Así que no se te ocurra desaparecer hasta dentro de un buen tiempo. Quiere te , para que yo te pueda querer mejor. 
P.D: Eres hermosa. No lo olvides nunca. Porque yo no lo olvidaré.

Que gaudiu d'una bona diada.

Hola, avui pujaré dugues entrades, aquesta en català i un altre en castellà totalment diferent. Moltes persones espanyoles rebutgen, critiquen i bombardegen amb insults cada dia als catalans del món. Estic completament segura de què cada dia hi ha algun català que pateix algun tipus d'agressió només per defendre la seva terra i la seva llengua. Molta gent fica en dubte l'hospitalitat dels catalans, diu que són uns garrepes, que rebutgen a la gent de fora i que no valen una merda. Jo , sóc de fora. Vaig néixer a Argentina i visc aquí d'ençà que tinc ús de raonament, i puc assegurar que tot això és mentida. Podeu dir 'si claropero como  te has criado aquí ellos no te dicen nada.' però no, no és per això. Perquè ,sabeu? Jo conec a motla gent que potser fa 2 dies ha arribat a aquí, ve nou o nova a l'institut, i el 1er que fan els meus companys CATALANS és intentar ajudar-lo, sigui de la nacionalitat que sigui, tingui del color que tingui la seva pell, sigui com sigui el seu aspecte, ni el rebutgen ni l'insulten, res. Fan el que esta a les seves mans per què la seva estància en aquest meravellós País, que es Catalunya, sigui meravellós. Mentre molta gent espanyola rebutja i critica a gent de fora, els hi fiquen sobre noms despectius com 'sudacas' o 'moros' els insulten segons el color de la seva pell i la forma dels seus ulls o el seu aspecte. Fa dos anys em vaig traslladar a viure a un dels pobles més catalans que us podeu imaginar, aquest poble, senyors i senyores, és un dels MILLORS POBLES ON HE TINGUT EL PLAER D'ESTAR. De veritat penseu que són uns garrepes? Mireu, quan desgraciadament jo vaig haver de marxar d'aquell poble a Barcelona, vaig marxar sense dir res a ningú, realment aquell dia ni tan sols jo sabia que marxaria, que no tornaria, va passar una setmana, i no tornava. Vaig decidir que ja era hora de comunicar als meus estimats companys que marxava, que no tornaria a aixecar me pels dematins per anar a l'institut amb ells. Voleu saber que va passar? Em van deixar el Facebook fet pols. Ple de publicacions i missatges dient que em trobarien a faltar, demanant me que els anés a veure, desitjant me que tingués sort, hi va haver gent que em va trucar a l'hora del pati,de l'endemà de comunicar-ho, dient me que m'estimaven mentre ploraven. Com és obvi, vaig haver de tornar per recollir les meves coses i depàs dir adéu. Vaig poder quedar me 3 dies allà, vaig aconseguir quedar me a dormir a casa d'una amiga, i quan vaig entrar a la classe, crec que vaig quedar me sense respiració durant 3 minuts mentre tothom m'abrasava, vaig fer classe amb ells, classe normal. Durant dos dies, van ser els dos millors dies d'institut de me vida. Al tercer dia, em vaig adonar de què havien fet una col·lecta, tots els de la classe van ficar 2 euros i em van comprar una pila de regals, també em van fer un dossier, tots els de la classe van escriure-hi.
No teniu idea del que uns 'catalans de merda' van fer per mi. Van estar sempre al meu costat, i ara com ara, gràcies a ells, puc dir que em sento catalana. I que Catalunya seria un PAÍS ENVEJABLE. Que gent com la que hi ha a Catalunya escasseja massa en aquest món. Ara per ara, puc SENTIR ME ORGULLOSA de sortir al carrer i veure la Via Catalana, veure senyeres penjant dels balcons i gent que, si no saps parlar català, no se te'n fot a la cara, t'ajuda a aprendre la llengua, t'ho explica si cal, t'ajuda a adaptar te mentre desgraciadament segueix legalment perteneixent a un país que té un govern que a persones immigrants com jo, cada dia els hi fiquen més i més difícils les coses, allarguen els tràmits per poder nos legalitzar, ho allarguen tot de manera que tinguin més marge de temps per fer-nos fora. Sabeu quin és realment el problema? El problema no són els immigrants, el problema és que tots els diners que Catalunya guanya, que sua sang per aconseguir, se'ls queda Espanya i van destinats a Madrid. Per això, mentre a les escoles públiques de Madrid els nens estudien tots amb tabletes i ordinadors portàtils, aquí a Catalunya els nens i les nenes han de reciclar llibres, molts pintats, altres trencats, però quasi sempre llibres, molts pocs centres d'educació tenen l'equipament necessari per adoptar aquest tipus d'educació, però tampoc tenen pressupost per intentar avançar amb la tecnologia. És realment una vergonya com tracten als catalans. Avui, 11 de setembre de 2013, és un gran dia, és la DIADA. I estic orgullosa de, sent immigrant, viure a un País com Catalunya.
Amb tots els meus respectes a Espanya.
Att: Una catalana no de sang, de cor.